Si eres de las personas que disfrutan tomando una buena copa de vino, seguramente habrás escuchado alguna vez el término vino de pago. ¿Tienes curiosidad por conocer más sobre este tipo de vino? En este artículo te contamos qué significa y por qué tiene tanta trascendencia entre los amantes del vino.
[pswp_products ids=»422,1947,1999″]Antes de empezar: ¿sabes qué es un pago?
Un pago es un paraje o sitio rural con nombre propio y características particulares en el suelo y el clima que lo diferencian de otros de su entorno. El concepto de pago está asociado al de terruño, es decir, pequeñas porciones de tierra donde las uvas se adaptan de una manera óptima. En estos espacios las plantas deben compartir la misma orientación, ya que se busca lograr la mayor homogeneidad posible en la maduración de las uvas.
Gracias a que cada vez toma más relevancia el concepto de terruño, muchas bodegas deciden hacer referencia en sus etiquetas al origen de las uvas con las que producen sus vinos. No obstante, es importante tener en cuenta que esta mención no determina necesariamente que estemos ante un vino de pago.
Distinción de los vinos en España
En España, como en buena parte de los países productores de vino, existen categorías que permiten clasificar y distinguir los distintos tipos de vinos que se producen en un territorio determinado. Justamente, la denominación vino de pago es una de las distinciones a las que puede aspirar un vino español.
Antes de llegar a ese nivel, existen otras clasificaciones que hay que conocer. Estas son:
- VM – Vinos de Mesa
- VT – Vinos de la Tierra
- VCIG – Vinos de Calidad con Indicación Geográfica
- DO – Vinos de Denominación de Origen
- DOCa- Vinos con Denominación de Origen Calificada, donde podemos clasificar a la DOCa Rioja.
- VP – Vinos de Pago
¿Qué es un vino de pago?
Ahora que entendemos a qué nos referimos cuando hablamos de un pago y tenemos presente las categorías con las que se clasifican los vinos en España, podemos abordar la gran pregunta: ¿qué es un vino de pago?
Un vino de pago es un tipo de denominación de origen española que permite garantizar de dónde provienen las uvas con las que se elabora un vino y las características específicas del terreno de origen.
Requisitos para elaborar un vino de pago
- Debe producirse en un terruño con características específicas y diferenciales en su microclima y suel
- Las personas físicas o jurídicas que produzcan y embotellen este tipo de vino deben ser también los dueños o titulares de los terrenos donde se encuentren los viñedos y las bodegas.
- Las uvas utilizadas deben proceder de un viñedo ubicado en un pago específico. A su vez el vino debe producirse, embotellarse y almacenarse por separado de otros con diferentes denominaciones de origen.
- El sistema y control de calidad aplicado para este tipo de vinos debe ser de carácter integral; es decir, debe cuidarse todo el proceso de producción, distribución y venta, desde la cosecha hasta su promoción en el mercado.
- El pago donde se produzca el vino debe haber pertenecido al menos durante diez años a una misma denominación de origen protegida.
El vino de pago: una distinción que une
Lograr un vino de excepcional calidad es un reto que une a muchos productores. Actualmente, existen en España asociaciones que buscan proteger y potenciar la elaboración de vinos que cumplan con las condiciones para ser distinguidos como vinos de pago.
La idea de este tipo de organizaciones es defender y promocionar su cultura, ya que esta denominación de origen no solo es una etiqueta de prestigio, sino también un símbolo que demuestra que todavía se producen y comercializan vinos que respetan tradiciones antiguas.
El vino de pago, veinte años de historia
El vino de pago como denominación de origen está oficializado y regulado por el decreto 127/2000 desde el 1.º de agosto del año 2000. Sin embargo, fue en el 2002 cuando se le otorgó por primera vez esta distinción a la bodega española Manuel Manzaneque.
Con el paso de los años, la lista de bodegas que han conseguido esta clasificación ha crecido progresivamente. En la actualidad la lista asciende a unos 17 productores que tienen el lujo de decir que elaboran un vino de pago.
Tanto para los profesionales como para los consumidores, contar con este tipo de clasificaciones ayuda a cuidar la calidad de los productos españoles. Este sello asegura que cada paso en el proceso de elaboración, embotellado, crianza y distribución se ha llevado a cabo respetando los más altos estándares, nacionales e internacionales.
Si eres de los que se toma en serio el placer de disfrutar una buena copa, no dudes en darte el capricho, probar y saborear algún vino de pago. Esta experiencia te hará valorar aún más las obras maestras que elaboran las bodegas españolas.
[pswp_products ids=»422,1947,1999″]
Muy buenos vinos