¿Se puede intentar maridar vino y fast food y no morir en el intento? ¡Por supuesto que se puede! Si algo hemos aprendido de la revolución gastronómica de los últimos años es que hay que quitarse los prejuicios de la cabeza y estar abiertos a experimentar con todos los sabores, aromas, colores y texturas que podamos imaginar. Más aún si contamos con un producto tan diverso y universal como el vino como parte de nuestro maridaje. Existen vinos tan diversos y diferentes entre sí que resultaría muy difícil encontrar algún plato que no pueda verse mejorado al degustarlo junto con una buena copa de vino. Y esto es perfectamente aplicable también a la comida rápida o fast food. Solo es necesario acertar con el vino perfecto para cada ocasión. Por ello, hoy vamos a ver algunas propuestas de maridaje de vino con algunos de los platos de fast food más típicos que son los más socorridos cuando coger el móvil y pedir a domicilio es una opción más fácil y rápida que ponerse el delantal.
Pizza
La pizza es una de las opciones favoritas de fast food, y de comida en general, de los consumidores a nivel global. El secreto del éxito de esta receta es su masa, elaborada a base de harina, agua, levadura y sal; a la que una vez lista, puede añadirse casi cualquier ingrediente que podamos imaginar. Las más clásicas recuerdan al origen italiano del plato y a los sabores y aromas mediterráneos: aceite de oliva, tomate, queso parmesano, orégano, albahaca… ¿Por qué no acompañar estos sabores con un refrescante vino blanco semi-dulce? Nuestra primera recomendación, un blanco suave, floral y fresco como nuestro blanco semi-dulce Diamante. También puedes optar por maridar la pizza con un vino rosado, fresco y dulce como el Diamante Rosado Semi-dulce.
Hamburguesa
Si la pizza es uno de los platos de fast food por excelencia, las hamburguesas no se quedan a la zaga en cuanto a popularidad. Este bocadillo de origen alemán se caracteriza por su intenso sabor a carne, normalmente de vacuno. Una muy buena opción para acompañarla podría ser un vino tinto joven o incluso un Crianza con algo más de cuerpo, para equilibrar el peso de la carne en el paladar. Y es que el aroma a regaliz y ahumados junto al sabor afrutado y especiado de nuestro Bordón Crianza le convierte en una extraordinaria opción para acompañar las carnes a la brasa.
Si nos gustan las hamburguesas especialmente contundentes, una buena alternativa sería maridarlas con vinos blancos secos como el Bordón Blanco o incluso con cava o champán, de forma que estos vinos sirvan para aligerar los bocados y nos ayuden a “limpiar” el paladar de los sabores persistentes de la carne y las salsas.
Pollo frito al estilo Kentucky
El pollo frito al estilo Kentucky es uno de los platos más deliciosos, jugosos y crujientes que podemos llevarnos a la boca, por mucho que nuestro dietista insista en lo contrario. Esta receta se caracteriza por su legendario rebozado y por la mezcla de especias que le dan su reconocible sabor y aroma. Una buena opción de maridaje puede ser acompañar este pollo tipo Kentucky de un blanco con buen cuerpo y cierto grado de acidez, que nos ayude a contrarrestar el efecto de las grasas, como un buen Chardonnay. Un rosado con cierto grado de aguja sería también una muy buena alternativa. Por ejemplo, un blanco que combina a la perfección con las carnes blancas es nuestro Diamante Verdejo, un blanco intenso con aroma a hierbas recién cortadas y recuerdos a frutas ácidas y exóticas.
Comida china
El pollo al limón, el pato a la naranja o el cerdo agridulce son algunos de los platos de fast food más recurrentes cuando lo que se nos antoja es pedir comida china. En estos platos se suelen mezclar sabores dulces, agrios y salados en proporciones similares. Y casi siempre se acompañan también de su buena carga lipídica. Un magnífica opción para elegir el blanco semi-dulce Diamante, que aporta un justo punto de dulzor y una frescura que puede ayudarnos a hacer estos platos tan potentes un poco más digeribles.
También puedes optar por acompañar la comida china con el Talla Diamante, que se caracteriza por sus toques exóticos y cítricos, su frescura y su gran equilibrio en boca.
Tacos
Tacos, nachos, fajitas… los bocados de comida mexicana suelen ser muy intensos, bien especiados y, claro está, picantes. Para maridarlos, una recomendación básica: evita los tintos con mucho cuerpo y alta graduación si no quieres pasar más calor que en la comunión de Charmander. Los vinos con mucho alcohol acentúan la sensación de calor del picante, así que mejor optar por algún vino con aromas frutales, limpio y ligero. Una copa del Bordón Blanco (elaborado con 100% Viura), será una excelente alternativa los amantes de la comida mexicana.
Si los blancos no son lo tuyo, también puedes optar por un tinto un poco especiado, para que no resulte insípido, pero con no demasiado cuerpo.
Sushi
SushiEl sushi es una de las pocas opciones de comida rápida que podemos considerar sanas, por lo que no podíamos dejarla fuera de nuestra lista de recomendaciones de maridaje con fast food. En este caso, los sabores sutiles del pescado fresco y el umami de la salsa de soja se llevarán a las mil maravillas con un vino blanco intenso, fresco y aromático como el Diamante Verdejo. Otros de los maridajes ideales del Diamante Verdejo son los aperitivos, pescados y mariscos, pastas, arroces y carnes blancas.
Kebab
Hay momentos en la vida en los que a uno le apetece un kebab y solo y únicamente un kebab. Si te dejas llevar por esta versión de la pasión turca aderezada con glutamato, lo mejor es acompañar el bocado con un vino potente que case bien con el sabor especiado del kebab. Un buen tinto con cierto grado de crianza y con buen cuerpo estará a la altura de la intensidad de este plato. Los producidos con variedades de Garnacha, Tempranillo o Sangoviese podrían ser opciones perfectas.
