El cambio climático es una realidad cuyas consecuencias están transformando el sector del vino. Y se trata de un problema especialmente delicado porque hay mucha incertidumbre ya que no tenemos un histórico en el que basarnos para tomar decisiones.

¿Qué cambios se están produciendo en las temperaturas y pluviometría?

Analizando los datos de los últimos años vemos como los meses de la primavera, tradicionalmente lluviosos, hoy en día son mucho más secos. En el verano, las temperaturas cálidas se han vuelto extremas. Durante este último verano de 2019 las temperaturas alcanzadas en el Valle del Ebro han batido todos los récords históricos de máximos y no sólo durante un día sino durante varias semanas consecutivas. También el verano era considerada una época muy seca, pero si vemos lo que está pasando con respecto a los cálculos de medias de lluvias, vemos como en un día de verano han caído 80 litros de agua (por metro cuadrado) que el suelo no es capaz de absorber y esto puede ocurrir hasta dos veces. Con lo que en tan solo dos días han caído 160 litros que es casi el 40% la media de lluvia que cae en todo un año (450 litros/m2).

Durante el otoño, de octubre a diciembre, las temperaturas deberían ser frías y con lluvia. Sin embargo, mirando la estadística de estos últimos 4 años vemos que han sido cálidas y secas, retrasando el comienzo de la temporada de frío hasta entrado enero. Esto provoca que el invierno se haya acortado mucho, ya que a finales de febrero y primeros de marzo las temperaturas ya son casi primaverales.
 

¿Cómo afecta dicho cambio climático a las plantaciones de vid?

 

  • Las plantas de la vid están aclimatadas a las temperaturas extremas, pero no a acumular tanto estrés por aumento de temperaturas. Cuanto más calor, más producción de azúcar en las uvas y con ello más alcohol en el vino. También a la vez que aumenta el grado
    alcohólico disminuye la acidez, y si el vino no tiene una acidez equilibrada puede afectar a su longevidad. Por ello se toman diferentes medidas en las plantaciones actuales como su reorientación hacia el norte, buscar viñedos con mayor altitud, etc.
  • Con dicho aumento de las temperaturas y con ello la reducción de las temporadas de frío extremo (nevadas y heladas), la proliferación de los microorganismos y agentes patógenos en las plantas es mayor, lo que obliga al viticultor a tener que aumentar los tratamientos para luchar contra dichos agentes patógenos.
  • La ausencia de lluvias durante temporadas tan largas hace a los viticultores tener que incorporar a sus cultivos el riego por goteo. Aumentando los costes y otros problemas añadidos que esto conlleva.
  • Las tormentas de verano y el factor de la gota fría habituales hace años en otras zonas de nuestro país, también comienzan a ser habituales en Rioja y así vemos como la reducción de nuestras cosechas por granizo y tormentas de verano se ha convertido en
    algo cotidiano.
  • La suma de los anteriores puntos hace que: en estos últimos 10 años las plantas han visto como su esperanza de vida se reducía en un 30%.

 

¿Cómo lo solucionamos en Bodegas Franco-Españolas?

Medidas que ha tomado Bodegas Franco Españolas para combatir el Cambio Climático en la elaboración de nuestros vinos Bordón y Diamante:

  • Las nuevas plantaciones están ubicadas a mayor altitud, aproximadamente a 670 metros, ya que la altitud media que tenemos actualmente ronda los 450 metros. Con ello conseguimos mitigar las altas temperaturas y parte del estrés hídrico.
  • Reorientar nuestras parcelas. Tradicionalmente la posición de las parcelas eran Sur buscando la mayor exposición posible al sol. Hoy lo que hacemos es justo lo contrario, la orientación es Norte buscando el sombreado del racimo para reducir las horas de exposición del sol.
  • Reestructuración de nuestras viñas incorporando goteo, para mitigar el efecto de la sequía extrema. Con ello se consigue controlar el estrés de la planta y producir uva de mayor equilibrio. Realizando aportes necesarios en momentos muy puntuales.
  • Apoyarnos en la tecnología. Se han instalado subestaciones climáticas que nos ayudan a estudiar exactamente cómo se encuentran nuestras parcelas. También se han instalado sensores tanto en suelo como en las plantas para estudiar su continua evotranspiración y controlar sus momentos críticos, de esta manera podemos realizar un aporte de agua en el justo momento.
  • Elección a la hora de una nueva plantación de variedades viníferas menos susceptibles de sufrir estrés como el Graciano.

Bodegas Franco-Españolas

Bodegas Franco-Españolas es una de las grandes bodegas de Rioja. Con nuestros 125 años de historia, continuamos siendo un referente a la hora de hablar sobre el mundo del vino.

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